Los investigadores del hospital Cedars-Sinai Medical Center y otros 50 centros demostraron dosis que la taribavirina reduce las tasas de anemia y aumenta la respuesta virológica sostenida (RVS) en pacientes con infección crónica por hepatitis C (VHC). Los detalles completos de este estudio están disponibles en la edición de octubre de Hepatology, una revista publicada por Wiley-Blackwell en nombre de la Asociación Americana para el Estudio de las Enfermedades Hepáticas (AASLD).
Cuando se utiliza en combinación con peginterferón alfa (peg-IFN), RBV mejora significativamente durante el tratamiento la respuesta virológica y reduce las recaídas. Sin embargo, RBV, en particular la combinación de interferón y RBV, está asociada con anemia hemolítica, una toxicidad significativa como resultado de la acumulación de RBV en los glóbulos rojos. Taribavirin (TBV), anteriormente conocido como viramidina, es un análogo de nucleósidos y pro-droga de RBV que es menos capaz de entrar en las células rojas de la sangre, y por lo tanto debería estar asociada con anemia significativamente menor.